Siempre trato de ser positivo. Esto puede tener una oportunidad. Tendrán que luchar duro, pero es su futuro. No el mío. Luché durante 50 años. Ahora es el turno de otra persona. Buena suerte. Que Dios te acompañe. Tu único planeta depende de ello. No tenemos otro lugar a donde ir, por ello ya hay empresas que consiguen energías sostenibles, como el mar.
Los Jóvenes Demócratas atacan temprano y con fuerza
Un movimiento insurgente está presionando a los demócratas para que apoyen una solución ambiciosa al cambio climático.
Si se quiere creer el reciente informe del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático, la humanidad tiene poco más de una década para controlar las emisiones de carbono antes de que los impactos catastróficos del cambio climático se conviertan en inevitables.
El Partido Republicano generalmente ignora o niega ese problema. Pero el Partido Demócrata dice que lo acepta y lo entiende.
Es extraño, entonces, que los demócratas no tengan un plan para abordar el cambio climático.
Su último gran plan - la Ley de Energía Limpia y Seguridad de los Estados Unidos - fue aprobado por la Cámara de Representantes en 2009, pero pasó a morir sin ceremonias antes de llegar al Senado. Desde entonces, no ha habido nada que lo reemplace.
Muchos políticos demócratas apoyan políticas que reduzcan la contaminación climática -créditos fiscales para la energía renovable, normas de ahorro de combustible, etc.- pero esas políticas no se traducen en una solución integral, ciertamente nada como lo que el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) sugiere que es necesario.
Los jóvenes activistas, que se verán obligados a vivir con los estragos del cambio climático, lo consideran perturbador. Así que han propuesto su propio plan. Se llama el Green New Deal (GND) - un término que recuerda a propósito el New Deal original de Franklin Delano Roosevelt en la década de 1930 - y se ha convertido en el tema de conversación de la ciudad.
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